Según Violeta Hemsy de Gainza, «el niño no aprende por repetición sino por un acto de comprensión, más aún, de revelación». En este sentido la iniciación musical se presenta como una fase del aprendizaje de un instrumento. Desde los 5 años, los niños y niñas pueden experimentar con la música, conociendo los instrumentos y aprendiendo a interpretar.